Juan Carlos Reséndiz | Socio Líder de Asesoría en Gobierno Corporativo, Riesgo y Sostenibilidad. Alicia Moreno Lara | Directora de Estrategia ASG de KPMG México
La 28va Conferencia de las Partes (COP28) de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC), que se celebra del 30 de noviembre al 12 de diciembre de 2023, en Dubái, Emiratos Árabes Unidos, reúne a líderes de numerosos países, a fin de desplegar esfuerzos que fortalezcan la agenda climática mediante el intercambio de ideas, estrategias y compromisos encaminados a abordar los impactos, riesgos y oportunidades (IROs) para el desarrollo sostenible.
En este marco, el Net Zero Readiness Report 2023 de KPMG examina los planes y medidas adoptadas por 24 países en sectores económicos clave, para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), destacando acciones como las siguientes:
- Aumentar las expectativas
Estados Unidos ha anunciado incentivos fiscales para promover la descarbonización; China proyecta inversiones masivas en energías renovables e infraestructura; Australia introdujo políticas federales para reducir emisiones; Canadá incluyó incentivos para inversiones en «economía limpia» en su presupuesto federal, y la Unión Europea (UE) aumentó sus ambiciones para lograr un sistema energético más resiliente y menos dependiente de fósiles rusos.
- Reforzar el alcance
Jurisdicciones de México, Australia, Nueva Zelanda, Corea del Sur, China y la UE están implementando sistemas de comercio de emisiones (ETS, por sus siglas en inglés), mientras que el Mecanismo de Ajuste en Frontera por Carbono (CBAM, por sus siglas en inglés) continúa su despliegue en la UE.
- Privilegiar energías más limpias
Japón y Dinamarca están desarrollando procesos de producción, conexión y mantenimiento de energía eólica en aguas profundas. Por su parte, Singapur aprobó una interconexión con cables submarinos para importar electricidad renovable.
- Promover el uso de vehículos eléctricos
El incremento en la fabricación, compra y venta de automóviles eléctricos puede verse reducido por la falta de capacidad de infraestructura de carga, cargadores incompatibles y capacidad limitada de las redes eléctricas.
- Considerar principios de transición justa
Se deben tomar en cuenta los riesgos y oportunidades sociales en el camino hacia una economía baja en carbono, buscando un diálogo e involucramiento significativo de trabajadores, comunidades, proveedores y consumidores, entre otros grupos sociales implicados.
- Involucrar a la ciudadanía
Se observa una preocupación o resistencia por parte de la sociedad para participar en los planes de transición verde, ya que las personas consideran que estos pueden afectar su modo de vida o sustento.
Te podría interesar: Instituciones financieras latinoamericanas y su papel para lograr la sostenibilidad ambiental
Si bien los esfuerzos cada día son mayores y más rigurosos, aún son insuficientes. Por lo tanto, de acuerdo con el Panel Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés) debemos centrarnos en actuar de manera profunda, rápida y sostenida, si queremos lograr reducciones de emisiones GEI sustanciales en todos los sectores.
Conseguir lo anterior es viable si conjuntamos visiones innovadoras y metas tangibles en el escalamiento de energías renovables, implementando infraestructura y estrategias de adaptación climática, así como un acceso a mecanismos de financiamiento destinados a lograr una transición energética justa y sostenible.