La impresión es hoy más importante que nunca y es un segmento que está cambiando rápidamente. Los desafíos de sostenibilidad están impulsando la demanda de aditivos libres de politetrafluoretileno (PTFE) a medida que los consumidores buscan cada vez más alternativas respetuosas con el medioambiente. Las regulaciones a nivel mundial también están dirigidas al PTFE y sus contrapartes PFAS (sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas), lo que significa que ahora es el momento de unirse al viaje de la impresión sostenible.

La buena noticia es que con la continua evolución de las tintas y su impacto en nuestro medioambiente, ahora es posible imprimir de forma respetuosa con el medio ambiente, lo que hace que el mundo de la impresión sostenible sea apasionante.

Comprender el desafío del PTFE

Históricamente, el PTFE se ha utilizado como aditivo para proteger las etiquetas de los envases, pero hoy en día el tema crítico del uso de ceras de PTFE en tintas de impresión está recibiendo cada vez más atención. Estas ceras, reconocidas por sus cualidades antiadherentes en utensilios de cocina, se han empleado para mejorar la resistencia al frote en aplicaciones de tintas de impresión. Sin embargo, a medida que aumentan las preocupaciones ambientales, la atención se ha desplazado hacia el posible impacto ecológico de estos compuestos.

Tanto el PTFE como sus homólogos PFAS generan alarma debido a su persistencia en el medioambiente y su potencial para acumularse dentro de los ecosistemas con el tiempo. Esto ha llevado a la industria de la impresión, las marcas y los fabricantes a reconsiderar el papel de las ceras de PTFE en las formulaciones de tinta y buscar alternativas más sostenibles.

El panorama regulatorio también está cambiando rápidamente. Los compuestos relacionados con el PFOA están regulados en la Unión Europea desde julio de 2020. Además, la UE ha publicado una hoja de ruta de restricciones como parte de la Estrategia de Sustancias Químicas para la Sostenibilidad.

Esto enumera los PFAS, de los cuales el PTFE puede ser una fuente, como productos actualmente en tramitación para una mayor restricción. En 2022, la agencia medioambiental de Japón aprobó una prohibición de la fabricación, importación y uso de 56 compuestos relacionados con el PFOA en virtud de la Ley de Control y Sustancias Químicas del país, mientras que en septiembre pasado la EPA de Estados Unidos publicó una norma propuesta que busca, por primera vez, designar PFOA y PFOS como “sustancias peligrosas” según la ley federal Superfund.

Un vistazo al futuro: Ceridust 8330

Siguiendo el camino sostenible, surge una solución destacada un exclusivo aditivo de base biológica, elaborado por Clariant a partir de un recurso renovable, es un verdadero avance para diversas tintas de impresión. Caracterizado por una combinación de rasgos poliméricos flexibles y resistentes, Ceridust 8330 exhibe propiedades superiores de resistencia al frote en comparación con los productos convencionales a base de cera, incluidas las mezclas de PE/PFTE, y se puede dispersar fácilmente en sistemas de tinta a base de agua y solventes.

Además, mientras que Ceridust 8330 permite satisfacer las necesidades de un mayor coeficiente de fricción (COF) y cumple con los requisitos antideslizantes, Ceridust 3030, 3610 y 3620 están bien adaptados para reducir el COF en aplicaciones de bajo deslizamiento.

Finalmente, un beneficio único de Ceridust 8330 es su potencial de reducción de dosis. Las formulaciones de tinta que utilizan Ceridust 8330 pueden lograr un rendimiento similar o incluso superior en comparación con los materiales que contienen PTFE, lo que lleva a un uso de tinta más eficiente.

Hacia una convivencia sostenible

A medida que evoluciona el panorama de la tecnología de la tinta, es vital reconocer que este viaje es continuo. Más allá de abandonar las ceras de PTFE, esta transformación representa un cambio integral hacia la sostenibilidad en todo el ciclo de vida de la producción de tinta.

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Desde la selección de materias primas para las formulaciones de tinta hasta la gestión responsable del final de la vida útil de los materiales impresos, cada decisión influye en nuestro impacto medioambiental. Al adoptar prácticas sustentables y respaldar alternativas ecológicas como Ceridust 8330, estamos moldeando un panorama de impresión que refleja nuestro compromiso con un planeta «más saludable».

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